La Flecha Envenenada: la enseñanza que nos da Buda

La Flecha Envenenada: la enseñanza que nos da Buda.

“No insistas en el pasado, no sueñes en el futuro, concentra tu mente en el momento presente”.- Buda

Hace unos días leí un relato cuyo nombre es el mismo que aparece en el título: "La Flecha Envenenada". Y por lo que pude notar, este relato corto pero con gran significado es una parábola del famoso Buda. Un relato en el cual dicta sobre lo que realmente debemos poner atención en el momento, poner atención sobre lo que nos sucede, ¿por qué? porque en el relato podemos notar como un hombre al ser herido por una flecha, en vez de preocuparse por su salud e ir al médico, presentó una actitud absurda y necia: se negó a recibir tratamiento a menos que tuviera las respuestas a ciertas incógnitas que eran insignificantes y de poca importancia en su momento. 

En este relato aprendemos que para todo hay un tiempo pero que de igual manera este tiempo no debemos de malgastarlo con cuestiones absurdas o siempre evadiendo los problemas. En la parábola del Buda, se recurrió a un argumento teológico, ontológico y así mismo lógico porque este se basaba en lo divino o espiritual y al mismo tiempo apelaba a la reflexión crítica de la realidad y su argumentación para dar respuestas a preguntas que tenían que ver con cuestiones metafísicas de la vida después de la muerte. 

En la parábola, este hombre murió porque no supo reconocer los tiempos, y en vez de preocuparse por lo que en ese momento era realmente importante, simplemente le daba vueltas al asunto con preguntas que, aunque para él eran muy interesantes o importantes, podrían haber sido resueltas en otro momento, como cuando saliera sano y salvo del médico. 

Este relato del Buda nos enseña que a menudo, al igual que el hombre de la flecha, le damos más importancia a cosas intrascendentes que nos impiden disfrutar del presente, sumiéndonos  en un estado de preocupación innecesario. Buda recurrió a un argumento teológico porque en todo su contraste se encontraba hablando con uno de sus aprendices en el monasterio y quería que reflexionara en el descontrol que estaba teniendo su ser espiritual; al mismo tiempo sus argumentos eran lógicos y ontológicos porque tanto apelaban a que reflexionara en su realidad crítica, es decir, lo que estaba viviendo en ese momento… este monje aprendiz tan solo estaba desperdiciando su tiempo en querer saber algunas cuestiones que podría aprender a medida que fuera creciendo; al mismo tiempo, en la parábola se encuentran argumentos ontológicos porque este hombre quería saber qué pasaría con él después de la muerte, tenía dudas sobre su existencia.

En conclusión, aprendemos que muchas veces solo nos preocupamos por cosas innecesarias o que a su tiempo podrán tener respuesta/solución, al igual que Buda con el monje del monasterio, muchas veces nos sucede a nosotros que nos desesperamos por saber las respuestas a incógnitas que a su tiempo pueden ser respondidas, más bien, debemos de actuar con un paso a la vez, y al contrario de lo que hizo el hombre de la flecha, debemos concentrarnos en lo que realmente nos ocurra para poder avanzar. 

- Merari May S.